Una vez leí, o me dijeron, no lo recuerdo bien, que siempre que se consumía algún alimento envasado, había que mirar bien el envoltorio o caja en el que viniera, ya que muchas veces vienen recetas curiosas e interesantes, que dan un gran resultado. Y así fue como comenzó este postre.
La base de esta mousse la encontré en un bote de Nata Helada... pero como no me convencía del todo le hice algunos cambios, y la verdad es que me quedó estupenda.
Este es sin duda uno de los postres estrella de las pasadas Navidades. De hecho, para la familia me piden que haga para las cuatro comidas especiales (Nochebuena, Navidad, Nochevieja y Año Nuevo), así que nada, con paciencia y tesón nos ponemos manos a la obra. Y eso que para elaborarlo se lleva tiempo, pues para que me quede perfecto lo comienzo a preparar con al menos 2 días de antelación, y ya vereis por qué.