Queríamos que los asistentes al bautizo se llevaran un recuerdo original del mismo, y ya que nos encanta la repostería, que mejor que regalarles a todos una galleta de mantequilla con formas de objetos de bebés, tanto para llevárselo como para comérselo. La idea la tomé del Blog La Cocina de Pinky.
Así que vamos a meternos en faena. La receta que os traigo son unas galletas de mantequilla cubiertas con glasa. Podéis utilizar los moldes que queráis, e incluso podéis fabricarlos vosotros mismos (al final os dejo un enlace).
- 250g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente.
- 250g de azúcar glass.
- 1 huevo grande a temperatura ambiente.
- 650g de harina tamizada
- 1 chorrito de leche para ligar la masa.
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla.
Para la Glasa:
- 2 claras de huevo.
- 400g de azúcar glass tamizada (200g por clara).
- La puntita de una cucharadita de maicena.
- 1 cucharadita pequeña de esencia de vainilla, anís, etc. (al gusto).
Comenzamos preparando la masa de las galletas. Ponemos en el vaso la mantequilla y batimos 2 minutos, velocidad 3.
Echamos el azúcar glass poco a poco, mientras movemos a velocidad 1.
Añadimos la Esencia de vainilla y el huevo y mezclamos 2 minutos, velocidad 3 1/2.
Con la máquina en marcha, y en velocidad 2, añadimos la harina tamizada a cucharadas por el bocal. Cuando acabemos, si la masa no quedase bien ligada, echamos un chorrito de leche y amasamos unos segundos más.
Sacamos la masa, la envolvemos bien en papel film y la metemos en la nevera unas 2 horas.
Para hacer las galletas, vamos sacando de la nevera trozos de masa, dejando el resto dentro para que no se caliente. entre dos papeles de hornear, y con ayuda de un rodillo, vamos extendiendo la masa hasta dejarla de un grosor aproximado de 0,5cm e intentando aprovechar todo el espacio que nos ofrezca la bandeja del horno.
Retiramos uno de los dos papeles de hornear y con la ayuda del corta-pastas que elijamos formamos las galletas, haciendo las figuras en toda la masa extendida. Con la ayuda de un cuchillo retiramos la masa que no forme parte de las figuras, de forma que nos quedará una bandeja de horno, con la forma de las pastas listas para hornear.
Con el horno precalentado a 180º horneamos durante 10-12 minutos aproximádamente, hasta que veámos que estén doradas. Las sacamos y dejamos 2 minutos en la bandeja, y después pasamos a una rejilla para que terminen de enfriarse (podemos utilizar la rejilla del horno)
Mientras se cuecen en el horno, aprovechamos para preparar la siguiente hornada, y así aprovechamos el tiempo que el horno está encendido.
Una vez que estén frías están listas para decorar.
Es el momento de preparar la glasa.
En un bol ponemos las claras y las batimos un poco sin llegar a montarlas. Mientras batimos añadimos el azúcar glass a cucharadas. Aproximádamente a la mitad del azúcar, añadimos el aroma y la maicena y seguimos batiendo hasta terminar. Tiene que quedar la textura de pasta de dientes, es decir, espesa para que sea consistente y poder hacer los bordes con la ayuda de una manga pastelera.
Una vez tengamos los bordes hechos, añadimos agua a la glasa a cucharadas, hasta tener la consistencia de un yogurth y con ella rellenamos los bordes.
La glasa nos quedará de color blanco, así que para darle un toque de color podemos añadir colorante alimentario al gusto. Para no tener que preparar mucha glasa ni cada vez, preparamos la cantidad total y en un bol aparte tomamos una parte de glasa, añadimos el colorante y seguimos con el proceso.
Dejamos secar y ya tenemos nuestras galletas terminadas.
Como dije al principio, estas galletas las preparé para el bautizo de mi hijo Jesús, y en aquella ocasión los moldes de los corta-pastas los realicé yo mismo. Toda la información la encontraréis en el siguiente vídeo.
Por último os muestro las galletas que hice en las pasadas navidades, con unos corta-pastas comprados para la ocasión.
Y ya sabéis, si queréis dar un toque especial en alguna celebración, estas galletas quedan estupendas.!!
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